LOS ENVEJECEDORES DEL
CEREBRO:
"OXIDANTES, ALCOHOL Y
ESTRÉS"
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYC0eetOoge_2SRPHaumIFx8n4WE2WlA0QSHg1ouuNtaYXUituJdISDxha341tDnCjnZl34dqr8zPOPHJiLl4HwXk2LtWiDCKrEaTn2rMbbzjN0PRsPGpCYS9G0EUODG9Q7wbKW0OLVyE/s1600/cere.jpg)
El cerebro y el sistema nervioso
están hechos de grasas esenciales, proteínas y fosfolípidos. A todos ellos les
dañan los oxidantes, que son los residuos nucleares del propio cuerpo, así como
el alcohol y el exceso de estrés.
Los oxidantes aumentan con el tabaco
Los oxidantes que son cuestiones
candentes en nuestros días constituyen un peligro en este siglo lleno de humos,
contaminación y de comida rápida.
La materia seca del cerebro está
formada en un 60 por ciento por grasa, y el tipo de grasas que se consumen
alteran la que hay en el cerebro. Las peores grasas son las denominadas
<<trans>>, presente en aquellos alimentos muy fritos y en aquellos
que contienen vegetales hidrogenados.
¿Por qué son tan malas las grasas <<trans>>?
Porque después de comerlas pasan
directamente al cerebro y aparecen en la misma posición que el DHA en las
células cerebrales, donde perturban los procesos de pensamiento. También pueden
bloquear la conversión de las grasas esenciales en las que son vitales para el
cerebro tales como GLA, DHA y prostaglandinas.
Para protegerse vale la pena
consumir alimentos ricos en antioxidantes, los mejores alimentos para cada
antioxidante antienvejecimiento son los siguientes:
Vitamina C: brécol, pimientos, kiwi, tomates, cítricos.
Vitamina E: semillas, nueces, judías, pescado.
Selenio: ostras, nueces de Brasil, atún, setas.
Glutatión: atún, legumbres, nueces, semillas, ajo, cebollas.
Antocianidinas: bayas, cerezas, uvas negras, remolacha, ciruelas.
Ácido lipoico: carne roja, patatas, zanahoria, espinacas.
Coenzima Q: sardinas, caballas, nueces, semilla, aceite de soja.
Comiendo estos alimentos ricos en
antioxidantes y añadiendo un suplemento de nutrientes antioxidantes se tiene la
mejor protección contra el Alzheimer y la disminución de memoria en la edad senil.
“El alcohol pone el cerebro en adobo”
El alcohol es el peor enemigo del
cerebro. Es incapaz de desactivar el alcohol, por lo que una vez que se ha
superado la capacidad del hígado, el alcohol comienza a desprenderse, y
perturba las señales de comunicación normales y hacen que empeore la memoria. Esta es una de las razones por la que nos
gusta, porque olvidamos nuestras penas.
El alcohol hace que la memoria se
vuelva más débil disolviendo los ácidos grasos dentro de las células cerebrales
y reemplazando DHA por un sustituto de peor calidad, el DPA. Bloquea también la
conversión de las grasas en DHA y en prostaglandinas. Estas son las principales
razones por las que el consumo de alcohol va unido a un deterioro mental,
destruye también las vitaminas, por lo que cuanto más se beba más nutrientes
serán necesarios.
Investigadores de la Universidad
del País Vasco (UPV/EHU) y la Universidad de Nottingham (Reino Unido) han
identificado los daños estructurales a escala molecular que provoca un exceso de
alcohol en el cerebro.
En concreto, según han explicado
en la revista PLoS One, han determinado las alteraciones que se producen
en las neuronas de la zona prefrontal del cerebro, la zona evolutivamente más
avanzada y que controla las funciones ejecutivas tales como la planificación y
el diseño de estrategias, la memoria de trabajo, la atención selectiva o el
control de la conducta.
Para ello, analizaron los cerebros
de 20 personas fallecidas en las que se había diagnosticado un
abuso/dependencia alcohólica y otras 20 no alcohólicas.
Así determinaron que los
elementos alterados pertenecen a las familias de proteínas denominadas
tubulinas y espectrinas. Las tubulinas conforman el citoesqueleto de las neuronas,
su arquitectura y las espectrinas tienen como función el mantenimiento de la
forma celular. De esta manera, ambas facilitan la relación y la actividad entre
los componentes de la red neuronal del cerebro.
En conclusión al estudio, los
cambios de la estructura neuronal inducidos por el etanol podrían afectar a la
organización, capacidad de relación y funcionamiento de la red neuronal, y
podrían explicar gran parte de las alteraciones de comportamiento, cognitivas y
de aprendizaje atribuidas a las personas que sufren alcoholismo, este
constituye el primer paso para continuar investigando.
¿Por qué le vuelve a uno olvidadizo el estrés?
Esto se debe a que el estrés
incrementa los niveles de la hormona cortisol, y esta daña nuestro cerebro.
Según los estudios llevados a
cabo por el profesor Robert Sapolsky, de la Universidad de Santford, dos
semanas de niveles elevados de cortisol a causa del estrés hacen que se
marchiten las dentritas, que son las conexiones entre las células cerebrales.
Además, usando una técnica de
obtención de imágenes, Douglas Bremmer, de la Universidad de Yale, Connecticut,
ha demostrado que la parte del cerebro responsable del aprendizaje y de la
memoria es más pequeña en los pacientes con trastornos causados por estrés
post-traumáticos, y esto guarda una
buena correlación con una mayor falta de memoria.
Pero los estudios del profesor
Sapolsky han demostrado que las dentritas vuelven a crecer cuando disminuyen
los niveles de estrés.
Los niveles elevados de cortisol
provocados por el estrés se han relacionado con problemas de mala memoria,
constituyen un factor importante en la mayor incidencia de pérdida de memoria
en los años seniles y en la enfermedad de Alzheimer.
Linda Carlson y sus colaboradores
de la McGill University de Montreal han confirmado que en los pacientes de
Alzheimer, cuanto mayor es la cantidad de cortisol peor es su memoria. Hallaron
también que cuanto más altos son los niveles de otra hormona del estrés, el DHEA,
tanto mejor es su memoria.
DHEA: hormona adrenal antienvejecimiento
La dehidroepiandrosterona no sólo
ayuda a controlar el estrés, sino que también mantiene el correcto equilibrio
de los minerales, ayuda a controlar la producción de las hormonas sexuales y
produce masa corporal magra, mientras que reduce el tejido adiposo.
Por tanto, para evitar que el cerebro
envejezca habrá que:
· Evitar los alimentos que contengan grasas hidrogenadas.
· Limitar ingesta de alimentos fritos y procesados.
· Tomar alimentos ricos en antioxidante, como fruta, hortalizas, semillas y pescado.
· Añadir un suplemento de fórmula antioxidante que contenga betacaroteno, vitamina C, vitamina E, selenio, glutatión, antocianidinas, ácido lipoico y coencina Q.
· Dejar de fumar.
· Evitar o limitar el alcohol, además si no se bebe no afecta al cerebro.
· Hacer lo posible para reducir el nivel de estrés.
Bibliografía:
- Stress and cognitive function. Bruce S McEwen, Robert M Sapolsky. Current Opinion in Neurobiology 1995, 5(2): 2015-216. Encontrado en:
- Acciones cerebrales de los esteroides: estado actual de la respuesta al estrés e implicaciones en la conducta. A.M. Pascual-Leone Pascual, Investigador del CSIC. Encontrado en:
- Identifican cómo daña el exceso de alcohol al cerebro humano. EP/Infosalus. 14.06.2014-14.27h. Encontrado en:
- Optimum nutrition for the Mind. Patrick Holford,2003. Ediciones Robinbook, s.l., Barcelona. ISBN: 978-84-7927-693-5. Encontrado en:
http://listas.20minutos.es/lista/50-mitos-y-verdades-sobre-tu-cerebro-279293/
http://www.hoy.com.ni/2014/05/12/chile-es-el-pais-de-america-latina-con-mayor-consumo-de-alcohol/
No hay comentarios:
Publicar un comentario